Sus ojos alerta,sus manos empequeñecidas por alcanzar mayor frenesí por los diminutos botones de su celular, están vivos....,
son los otros en su red que le certifican ahora su vida,su amor,su sueño.
Momento tras momento,hora tras hora se fuman su tiempo,a la caza de lo que les satisfaga emociones a granel , sus crisis hormonales disparan su crecer apresurado.
Separados,en tribus,intocables,con barreras afectivas y sociales que les obligan hablar sus neologismos sensoriales con cargas de pasiones:Agresiones virtuales y miedos supuestos....
Sus amigos son sus sombras,sus transformadores a la realidad,confidentes que refuerzan sus tristezas y agrandan sus corazones de piedra.
No miran,no responden a los objetos concretos ni a palabras de autoridad y señalan con desden e inquisición la historia de sus padres.
Insatisfechos por lo poseído,sin caminos a la ciencia o a comprender , suspendidos a sus respuestas o elaboración de supuestos.
Aprecian y critican la vida desde lo fácil,lo tranzable ,lo deseable,ellos crecieron con la sentencia de hijos huerfanos de padres vivos.
Y si admiten una brecha para comunicarse,nos dejan salir todo ese abandono,esa soledad ,esa fantasía que le dejaron los suyos, para que los que mandan a la tribu urbana referente,les hagan pensar en ese solo infinito creador de silencios.
Y sabe, nos piden a gritos darle realidad a su camino,sentido a sus emociones y a un mañana de razones.
Son verdaderos incomprendidos en medio de tanta tecnología ,tanto vídeo,tanto ruido , plastifican la realidad ,la lucha de darle cuerpo a sus espantos y dudas.