A lo sublime de la desnudez nos hemos enfrentado,
ahora solo somos uno y solo uno;
nuestros ojos como faros nos dirigen,
nuestros labios se deborán sin cesar.
No hay control ni palabra alguna,
somos uno en deseo y pasión,
uno y otro destruimos los ropajes;
uno y otro ahora son deseo.
Que blancura e inocencia de tu cuerpo,
ahora de mujer y no de niña;
te haces insaciable a los deseos,
y solo pides posesión y posesión.
Hay solo pasión y no hay tiempo
hay solo pasión y solo cuerpos;
hay pasión,tiempo y cuerpos ,
hay ya historia,pasión y cuerpos.
Ahora somos carne,espíritu y pasiones,
ahora somos solo cuerpo y una pasión;
somos cuerpo,pasión en paraíso,
en donde Dios solo nos conoce el infinito.
3 comentarios:
No es nada fácil hacer un comentario a un escrito en el que me veo plasmada.
Describes de forma sublime los momentos vividos y al leer me llegan a la piel y a la memoria los recuerdos que se quedarán para siempre ahí después de habernos poseído casi en la totalidad.
Esta será siempre la primera ves, porque aunque abran otras que sin duda podrán ser mejores, lo que sentí en esos momentos será siempre diferente a lo demás.
Desnudar todo mi cuerpo, besarte en lo más íntimo, entregarme a vos sin medida es avanzar a lo infinito y estar cada vez más cerca de la felicidad. No me alcanzan las palabras y los momentos para darte todo lo que quiero.
Ahora que somos uno solo en cuerpo y alma la magia se hace más grande y el deseo y la necesidad de vivir al otro más fuerte.
Gracias por escribir cosas tan bellas a partir de lo vivido. Cuando leo cosas como estas me enamoro más de vos.
Te tengo en el alma.
Que felicidad plasmar en las palabras el universo del afecto,es como confesar ante Dios la verdad.
Si se es expontaneo y metido dentro del otro para alcanzar un climax,llegaremos al cenit de lo deseado.
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